El alcalde de Punta Umbría, José Carlos Hernández Cansino, ha girado hoy una visita a El Portil para ver el avance de las obras que se están acometiendo para mejorar el saneamiento de este núcleo urbano, encomendadas por Giahsa a la empresa UC10 SAU.
El primer edil ha acudido acompañado de la concejal delegada de El Portil, Angustias Domínguez, y del jefe de Servicio de Obras de Giahsa, José Joaquín Quintero, así como de responsables de la dirección facultativa y de obras, entre otros. Las obras se encuentran en estos momentos en la calle Zorzal, con un nuevo trazado, y avanzan a buen ritmo.
La actuación se enmarca dentro del Plan Renovas (Plan Estratégico para la Mejora de las Infraestructuras Hidráulicas y Planes de Inversión Municipal), priorizada por el Ayuntamiento de Punta Umbría, con un coste de 638.932 euros y un plazo de ejecución de 4 meses. Comenzaron el pasado 16 de septiembre, “justo al terminar la temporada alta, para causar las menos molestias posibles a los vecinos”, ha señalado Hernández Cansino.
Durante la visita, el alcalde ha considerado que es una obra “esperada y necesaria” y que da “tranquilidad porque se acaba con el riesgo de vertidos en la playa en una zona tan turística como es este núcleo urbano”. También ha dicho que supone “una de las mayores inversiones de este equipo de Gobierno, que realizamos conjuntamente con Giahsa, por el bien de los vecinos y la protección del entorno natural.”
Del mismo modo, desde el Ayuntamiento ya se ha contactado con los vecinos afectados con los que se mantendrá una reunión esta semana, al objeto de poder simultanear esta actuación con las conexiones necesarias a sus domicilios.
En líneas generales, se trabaja en la reposición de las infraestructuras que han sido destruidas por los efectos del mar, que dejó al descubierto la mayor parte del colector principal de saneamiento, con la destrucción de 210 metros de tubería de transporte de agua fecal y la desaparición de seis pozos de registro.
El colector de saneamiento destruido discurre entre el sistema dunar de la playa y el vallado de las viviendas colindantes hasta la EBAR (Estación de Bombeo de Aguas Residuales) existente.